El té negro se obtiene después de un proceso de oxidación. Las hojas recién recolectadas se extienden en habitaciones húmedas para que fermenten. Este tratamiento se prolonga por varias horas según la variedad y les otorga su característico tono verde oscuro o negro. Es el té con más cantidad de teína (25-100 mg por taza, según el grado de fermentación).
Una de las principales propiedades es su carácter antioxidante, común a todos los tés, debido a los polifenoles. El tanino, con más presencia debido a su mayor fermentación, proporciona un marcado carácter astringente, resultando un eficaz remedio contra la diarrea y gastritis.
Su capacidad estimulante constituye posiblemente su principal característica, tanto a nivel físico como psíquico. El té negro aporta gran número de minerales y otros elementos favorables para el organismo, como el zinc, cromo, calcio, potasio, magnesio, hierro, fósforo, flúor y aluminio.
El precio se incrementa en la terraza a 2,5 €