Las pochas con zanahorias y calabacín son un plato reconfortante y sencillo que resalta los sabores de la huerta.
Las pochas, alubias frescas de textura cremosa, se cocinan lentamente hasta quedar tiernas, absorbiendo los aromas del guiso. Las zanahorias aportan un dulzor natural y una textura ligeramente firme, mientras que el calabacín añade suavidad y frescura.